Con la nevada que hizo hace dos días se nos ocurrió hacer un pequeño experimento para comprobar por nosotros mismos que la sal derrite la nieve, e investigar cada uno por su cuenta el por qué.
Estas son las conclusiones de Lidia y Pablo, aunque hay que decir que la explicación es un poco complicada (sobre todo para entender) porque es un proceso químico. Así que, esto sería en pocas palabras:
Para volverlo a comprobar hemos puesto nieve en dos vasos de agua y hemos echado sal en un de ellos (en el segundo):
A los 20 minutos:
Echamos tanta sal que parece nieve, pero hay que fijarse en la cantidad de agua que hay en cada vaso, que es la nieve deshecha.
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